Había una vez...

Ella era insegura, tímida. Ella apenas y te miraba cuando hablaba. En ocasiones, era considerada descortés por el simple hecho de sentir tanta vergüenza hasta para saludar. Ella no empezaba la conversación a menos que tú lo hicieras, por temor a ser una molestia. Ella era pequeña, con muñecas igual de pequeñas y frágiles y heridas. Casi siempre la veías sosteniendo un libro, escondiéndose tras él, perdida en la inmensidad de su historia y sus páginas. Ella usualmente era blanco de las bromas dulces. No se consideraba atractiva, ni especial; pero tenía claro que era buena persona. Era una buena amiga, se esforzaba porque sea siempre así. A ella le gustaba soñar despierta: se adentraba tanto en su mundo que, en ocasiones, hablaba y gesticulaba sola, emocionada o triste o como se estuviese sintiendo. Los que la rodeaban creían que estaba loca, literalmente.
A ella le entusiasmaban las historias de amor. La timidez en la que se desarrollaban, el primer beso, la forma en que dos personas enamoradas brillaban en medio de una multitud, como un nuevo mundo multicolor. Hasta que...
Ella usaba anteojos de gruesa montura azul. Los amó en la tienda pero los odió puestos en ella (y o mismo sucedió con sus anteojos actuales). Normalmente era muy torpe y se le salían las cosas sin pensar. Cuando tomaba confianza con alguien, ya no había marcha atrás. Le encantaban los animales, aunque a veces a ellos no les gustaba mucho.
Ella amaba la melancolía del piano, la fuerza del violín. Le temía al mundo y al futuro, sin embargo, no a la muerte. Odiaba comprar ropa porque sentía que nada le quedaba bien. Tenía un extraño gusto por las estrellas y todo lo relacionado con ellas. Atesoraba hermosos recuerdos en los rincones de su mente y corazón; recuerdos que no estaban plasmados en papel o en un álbum, pero que, paradójicamente, eran los más valiosos.
Ella lo quiso. Mucho.
A ella no le gustaba su nombre, quería cambiárselo. Ella tenía ansias de crear, ya sea historias, música, dibujos. Ella quería ser recordada. Quería contribuir en algo con este planeta que era su hogar.
Ella apoyaba la igualdad, en todos los sentidos. Ella jugaba sola. Realmente, nunca le molestó. Ni siquiera notó lo sola que estaba hasta que mucha gente la rodeó. Creía que el maquillaje era una mentira piadosa. Siempre arrancaba primero la cabecita a los osos de gomita. La oscuridad le provocaba ansiedad. Adoraba los postres y el jugo de manzana. Nunca le mostró sus verdaderos escritos a alguien.
Ella temía no ser suficiente. Ella siempre se imaginaba siendo otra persona: más valiente, arrebatada, de esas que recordarías aunque sola las hayas visto una vez, de las que entraban en tu corazón como si fuera su casa.
Ella era yo. Todavía soy yo. Esta es una parte de mi historia...Solo espero que llegue el día en que una persona sea capaz de contar algo más interesante sobre mí.

Me gusta:

| Sentir la lluvia | Sentir el viento en mi piel y que alborote mi cabello | Escribir y leer | El sabor amargo del chocolate bitter | Ver películas en blanco y negro | La música en general y las fotografías | Los rayitos rojos que algunas veces se me hacen en el pelo | Reír hasta que me duela la barriga | El color del cielo al atardecer | Viajar  | El olor a tierra mojada y el aroma a pan recién horneado | Recoger piedras de cualquier lugar a donde vaya | Su cabello | El chicle de menta | Observar  | La textura de las hojas en un libro viejo |  Frida Kahlo  |  Los colores azul noche, gris claro y negro | Cantar, a pesar de no hacerlo bien | Mi lunar de nacimiento | Usar palabras desconocidas  (no por sonar intelectual ni nada parecido)| Guardar cosas para mí | Los ojos verdes y marrones | Los idiomas | Apoyar la cara en una superficie fría | Las formas de las huellas dactilares | "Serendipia"  | Ver el mundo a través de una lupa | Hacer reír a los demás  | Los detalles | Las arrugitas en los ojos cuando alguien sonríe | Los hoyuelos en las mejillas | Dibujar | El frío | Las antigüedades | Ver las estrellas | Las botas viejas que uso en invierno | Las caricaturas | El yaoi (como placer culposo) | Coleccionar recuerdos | El bigotito del cursor | 

No me gusta: 

| Mi risa | El calor | Los insectos | Tener un bloqueo mental | Que me interrumpan cuando leo | Llamar la atención de los demás | Embarrarme de arena en la playa | Que no respondan mis preguntas | Hacer deporte | El yogurt de fresa | No poder dormir cuando quiero hacerlo | No poder recordar | La sociedad | Que hablen demasiado | Tener miedo a quedarme sola | Que no cuiden algo cuando se los presto | Doblar o arrugar las hojas de mis libros | Mi estatura | Que no me escuchen cuando hablo | Las promesas no cumplidas  | El machismo | No saber qué decir | El aroma de los perfumes fuertes | Las guanábanas | No saber cómo se escribe una palabra | No encontrar lo que busco | Las personas que se creen superiores a los demás | Las despedidas  | El sabor ácido | Quedarme callada cuando hay gente delante |  No saber cómo animar a alguien cuando lo necesita | Hablar para más de 10 personas (peor aún si no las conozco) | Que me miren mientras como | Olvidar | Depende de mi ánimo, que me dirijan la palabra | Las mentiras  | Lo malhumorada que me pongo en fechas importantes | La discriminación de todo tipo | Mi cabello a todas horas| 

Mis deseos: 

• Tener una máquina de escribir y con ella publicar un libro.
• O simplemente publicar un libro.
• Aprender a hacerme la trenza de espiga.
• Aprender a hacerme la trenza alemana ( la de Katniss).
• Tener una camiseta con la bandera de Inglaterra.
• Tener unas zapatillas Converse All Star (de preferencia amarillas). [las que ahora tengo son azules, pero qué más da]
• Tener una cámara profesional (y saberla usar).
• Escribir un diario.
• Dibujar con carboncillo o pintar con acuarelas.
• Aprender a preparar pasteles o postres en general.
• Ir a un concierto de mis ídolos. (27/04/14 - 1D).
• Ir a Londres.
• Ir a Nueva York.
• Saber tocar la guitarra, el piano, el violín y la batería.
• Hacer que a mis amigos les guste más la lectura. 
• Ser más independiente.
• Tener un autógrafo de mis escritores y cantantes favoritos (al menos, de uno de ellos). [tengo el de Elizabeth Eulberg, la autora de "El club de los corazones solitarios" *o*]
• Ir a París.
• Pasar un año entero en Japón, para así poder apreciar el cambio en las estaciones del clima.
• Ir a California con mi mejor amiga.
• Hacer un viaje por carretera con amigos.
• Llevar una vida saludable. 
• Convertirme en la persona de la que alguna vez me enamoraría, como una forma de estimularme a mí misma.
• Navegar en una góndola en Venecia.
• Tocar la nieve.
• Hacer un muñeco de nieve, ángel de nieve, tener una pelea de bolas de nieve, deslizarse por trineo en la nieve. 
• Pintarme el cabello, por lo menos las puntas. 
• Hacer algo arrebatado que rompa mi zona de confort; dejarme llevar (asumiré las consecuencias por ello). [me pasé de copas...y créanme, no fue lindo]
• Aprender a hablar inglés (fluido), francés, japonés, ruso, alemán, italiano y coreano (en esos acepto un básico). 
• Experimentar el amor.
• Perderme en Egipto.
• Hacer la señal de los tres dedos frente al mar.
• Tomarme una foto con las letras de Hollywood.
• Bailar/Dormir bajo las estrellas.
• Bailar y que me besen bajo la lluvia [sueño de chiquilla enamorada que aún tengo]
• Correr un kilómetro sin parar.
• Volar en un globo aerostático.
• Ver una estrella fugaz y pedir un deseo.
• Ir al borde de un puente y gritar lo más fuerte que pueda.
• Tener el día más feliz de mi vida.
• Ganar un primer premio por mis relatos.

"Mi vida también fue una mancha negra en un lienzo blanco -pero entonces alguien me llevó a un museo y me llamó arte-. Quizá solo se trate de encontrar a quien te sigue mirando cuando tú cierras los ojos".

~Elvira Sastre~ 

 Mila.